Everybody Loves Diamonds

Amberes está alborotada: la inexpugnable meca de los diamantes ha sido asaltada. El mundo entero exige respuestas. ¿Quién sería tan audaz como para realizar el “atraco del siglo”? Entre los agitados clientes del Centro Diamante, se encuentra Leonardo Notarbartolo. Dependiendo de a quién le preguntes, puede ser un modesto joyero italiano o el mayor ladrón del mundo.

Encerrado en su celda, Leonardo intenta juntar las piezas del rompecabezas y se pregunta quién de los miembros de su equipo lo traicionó. ¿Quizás su viejo amigo Ghigo, el experto en alarmas? ¿O Sandra, el prodigio de abrir cerraduras? ¿Podría ser incluso Alberto, su hermanastro hacker?

Mientras Leonardo llega a un acuerdo secreto con el turbio abogado John Lovegrove, el jefe de la Policía del Diamante, Albert Mertens, sigue una nueva pista que involucra a alguien dentro del Centro Diamante.

Tener una relación sentimental con un ladrón no es fácil. Anna, la esposa de Leonardo, lo sabe muy bien y se ve acorralada por Mertens. Judith Dewitt, directora del Diamond Center, también se arrepiente de su relación con Leo cuando se encuentra en el punto de mira de la investigación. Mientras tanto, un hombre misterioso vigila de cerca a Leonardo.

La noticia de la relación extramatrimonial de Leonardo golpea muy duramente a Anna. Anna, sin embargo, no es la única que se siente traicionada: hay pruebas de quién traicionó a Leonardo.

Mientras Mertens recibe un aviso que no puede ignorar, Anna pone en marcha su plan de venganza para quitarle lo único que mantiene vivo a Leonardo. Mate.

Gracias a un aviso, Mertens lanza una gran operación policial. Gerald Kahn todavía tiene los ojos puestos en Leo.

Una vez fuera de la cárcel, Leo comienza a poner las piezas en movimiento nuevamente, mientras el resto de la pandilla y Gerald Kahn están a punto de recuperar los diamantes. Todo el mundo los quiere. Pero el Rey de los Ladrones vuelve a ser libre y tiene una sorpresa reservada para todos.